Hemodinamia y Cardiología Intervencionista

El servicio de Hemodinamia y Cardiología Intervencionista diagnostica y trata enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos, mediante la introducción de catéteres a través de venas o arterias.

Esta técnica permite diferentes procedimientos: observar el funcionamiento del corazón, conocer el estado de las arterias coronarias y desobstruirlas si es necesario, implantar un stent o válvulas cardíacas y corregir cardiopatías congénitas.

El servicio hace unos 2.000 procedimientos anuales, lo que lo convierte en uno de los centros con mayor volumen y experiencia en el país.

Cateterismo

 

Este procedimiento consiste en pasar sondas delgadas y flexibles, llamada catéteres, por los vasos sanguíneos, para valorar la anatomía y función del corazón y las arterias coronarias. El estudio se hace bajo control radiológico y se graba en una película para su posterior análisis.

Mediante esta técnica, el hemodinamista puede medir la presión y el flujo sanguíneo, ver si alguna válvula no está funcionando correctamente o si hay defectos congénitos, medir la concentración de oxígeno en diferentes partes del corazón y hacer una biopsia del tejido cardíaco para el diagnóstico de algunas enfermedades.

Si el especialista observa obstrucciones en las arterias coronarias, podría practicar una angioplastia e implantar un stent o convocar a los cirujanos cardíacos para resolverlo por vía quirúrgica.

Preparación

Previo al examen, su cardiólogo le indicará una evaluación paraclínica básica, para saber si está en condiciones de realizarse el estudio.

El paciente no debe comer ni beber nada de dos a cuatro horas antes del examen.

Los cateterismos se hacen con anestesia local, aplicada en la zona donde se introduce el catéter, en el antebrazo (punción de arteria radial).

Se inyecta un contraste yodado que le permite al especialista visualizar las estructuras y los vasos en el corazón. En caso de ser alérgico o haber tenido reacciones al material de contraste, deberá informarle al especialista para que tome medidas especiales.

Recuperación

El paciente deberá permanecer acostado durante algunas horas, luego del procedimiento. Dependiendo del caso, podrá ser dado de alta en la misma jornada o al día siguiente.

El paciente deberá seguir todas las recomendaciones de su médico en cuanto a medicación, alimentación y estilo de vida.

Angioplastia

La angioplastia es un procedimiento para restituir el flujo sanguíneo en una arteria que está estrechada o bloqueada. La técnica es igual al cateterismo, pero por el catéter se introduce otro catéter balón, que al ser insuflado ensancha la arteria y así restablece el flujo.

Con frecuencia, también se implanta un stent (endoprótesis vascular), que es un pequeño tubo de malla de metal que se expande dentro de la arteria, para impedir que se estreche de nuevo. En algunos casos también se puede implantar un stent liberador de fármaco, que previene que la arteria se cierre a largo plazo.

Preparación

El paciente no debe comer ni beber nada durante tres a cuatro horas antes del examen.

La angioplastia se hace con anestesia local, aplicada en la zona donde se introduce el catéter, que puede ser la ingle o el brazo.

Se le inyectará un contraste yodado que permite al especialista visualizar las estructuras cardíacas y las arterias coronarias.

Coméntele al especialista los medicamentos que toma e infórmele si es alérgico o ha tenido reacciones al material de contraste o al yodo.

Recuperación

El paciente deberá permanecer acostado durante algunas horas, luego del procedimiento. Dependiendo del caso, podrá ser dado de alta en el mismo día. La recuperación completa tarda una semana o menos.

El paciente deberá seguir todas las recomendaciones de su médico en cuanto a medicación, alimentación y estilo de vida.

Riesgos y complicaciones

Los procedimientos de Hemodinamia y Cardiología Intervencionista son seguros, al ser realizados por un equipo experiente. Cardiocentro realiza unos 1.500 cateterismos y 500 angioplastias anuales. Los riesgos y complicaciones son muy poco frecuentes, sucediendo en el 0.1% a 0.5% de los pacientes. Ellos son:

  • Accidente Vascular Encefálico 
  • Anafilaxia
  • Angor o Infarto agudo de miocardio 
  • Arritmias cardíacas
  • Disección arterial de arterias involucradas 
  • Edema pulmonar por sobrecarga de volumen 
  • Embolización del catéter
  • Fiebre, infección
  • Fístula arteriovenosa
  • Hematoma o sangrado en la zona de punción 
  • Hemorragia
  • Hipotensión arterial, nauseas, bradicardia 
  • Infección en la zona de punción o generalizada
  • Riesgos personalizados.
  • Isquemia aguda de la extremidad puncionada para el abordaje
  • Oclusión de la arteria coronaria
  • Perforación cardíaca y taponamiento 
  • Pseudoaneurisma femoral, radial
  • Reacción alérgica al medio de contraste
  • Reacción vagal (bradicardia, hipotensión)
  • Sepsis (fiebre, hemocultivo positivos) 
  • Tromboflebitis
  • Muerte
  • Otros 

Valvuloplastia

La valvuloplastia es un procedimiento que se hace para corregir la estrechez o rigidez en una válvula cardíaca. El especialista introduce un catéter a través de un vaso sanguíneo hasta el corazón. Al igual que en la angioplastia, este catéter tiene un globo, que en este caso se infla para estirar la válvula y que la sangre fluya correctamente. Esta técnica permite evitar o posponer una cirugía a corazón abierto. 

Preparación

El paciente no debe comer ni beber nada durante tres a cuatro horas antes del examen.

La valvuloplastia se hace con anestesia local, aplicada en la zona donde se introduce el catéter, que puede ser la ingle o el brazo.

Se le inyectará un contraste que permite al especialista visualizar las estructuras y los vasos en el corazón. Coméntele al especialista los medicamentos que toma e infórmele si es alérgico o ha tenido reacciones al material de contraste o al yodo.

Recuperación

El paciente deberá permanecer acostado, durante algunas horas, luego del procedimiento. Dependiendo del caso, podrá ser dado de alta en el mismo día. La recuperación completa tarda una semana o menos.

El paciente deberá seguir todas las recomendaciones de su médico en cuanto a medicación, alimentación y estilo de vida.

Riesgos y complicaciones

Las complicaciones posibles son las mismas que en el cateterismo y la angioplastia, pero en este procedimiento se pueden sumar otras:

  • La válvula puede continuar con su rigidez o estrechez
  • Fuga o retorno de sangre en la válvula tratada
  • Daños a las válvulas o al músculo cardíaco que pudieran requerir de una cirugía a corazón abierto
  • Hemorragia, infección o daño a los vasos sanguíneos donde se insertó el catéter
  • Ritmo cardíaco anormal
  • Formación de coágulos, que podrían embolizarse al cerebro
  • Ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular
  • Reacción negativa a la anestesia o al medio de contraste

Implante percutáneo de válvula aórtica (TAVI)

 © Medtronic QualMeD

La sangre sale del corazón a través de la válvula aórtica hacia la aorta, que es la mayor arteria del cuerpo. En algunos casos, la válvula no se abre completamente (estenosis aórtica), lo que disminuye el flujo de sangre y hace que el corazón se esfuerce más para bombear sangre. En la mayoría de los casos que se diagnostica en adultos, la estenosis se produce por la acumulación de depósitos de calcio.

Si bien históricamente la sustitución de la válvula aórtica se hizo por cirugía tradicional, hoy se puede realizar por vía transcatéter (Transcatheter Aortic Valve Implantation, TAVI) y es una solución para los pacientes considerados inoperables. Esta técnica consigue los mismos resultados de manera menos invasiva y con una recuperación más rápida.

Durante el procedimiento, si no tiene marcapasos, el médico colocará uno, que usará por 48 horas. El especialista llegará al corazón a través de un catéter, que tiene un balón en su extremo, y que se expande al llegar a la válvula. Luego guiará una válvula biológica hasta el lugar y la colocará sobre la original.

Preparación

En las dos semanas previas a la cirugía se le pedirá que deje de tomar los medicamentos que puedan dificultar la coagulación sanguínea.

También se le realizarán ecocardiograma transtorácico y/o transesofágico, angio-TAC, estudio angiográfico de los vasos aortoilíacos y estudio de la raíz aórtica, aorta ascendente y válvula aórtica mediante angiografía y/o tomografía computarizada.

El paciente no debe comer ni beber nada durante 12 horas antes del procedimiento, que se hace con anestesia general.

Se le inyectará un contraste que permite al especialista visualizar las estructuras y los vasos en el corazón. Coméntele al especialista los medicamentos que toma e infórmele si es alérgico o ha tenido reacciones al material de contraste o al yodo.

Recuperación

Después del procedimiento, pasará las primeras horas en cuidados intensivos y podrá estar internado de tres a cinco días. Al día siguiente de la cirugía ya podrá pararse y caminar.

Deberá seguir todas las recomendaciones de su médico en cuanto a medicación, alimentación y estilo de vida.

Riesgos y complicaciones

Las complicaciones posibles son las mismas que en el cateterismo y la angioplastia, pero en este procedimiento se pueden sumar otras:

  • Sangrado en la zona de punción
  • Accidente cerebrovascular
  • Bloqueo del ritmo cardíaco, que puede requerir la colocación definitiva de un marcapasos
  • Coágulos sanguíneos en la pierna que pueden llegar a los pulmones
  • Dificultad respiratoria
  • Infecciones, incluso en los pulmones, riñones, vejiga, tórax o válvulas del corazón
  • Reacción adversa a los medicamentos
  • Daño en los vasos sanguíneos
  • Ataque cardíaco
  • Infección en la nueva válvula
  • Insuficiencia renal
  • Ritmo cardíaco anormal
  • Sangrado
  • Cicatrización lenta de la incisión
  • Otros
  • Muerte

Corrección de cardiopatías congénitas del adulto

La cardiopatía congénita más frecuente en el adulto es la Comunicación Interauricular (CIA). Esta patología se produce mientras el feto se desarrolla en el útero: cuando se forma la pared (tabique) que divide la la aurícula izquierda y derecha, queda con un espacio que hace que la sangre pueda circular de un lado a otro. Esta cardiopatía puede ser severa y estar relacionada a otras malformaciones o puede ser leve y no dar síntomas hasta la adultez.

En algunos casos, este problema se puede tratar por cateterismo, sin necesidad de una cirugía a corazón abierto. El especialista introduce catéteres en un vaso sanguíneo y llega hasta el corazón, donde implanta un dispositivo de cierre de la CIA, que impedirá que la sangre siga fluyendo de una aurícula a otra. Este procedimiento se hace con ecocardiografia transesofágica en simultáneo.

Preparación

Este procedimiento se hace con anestesia general y requiere 12 horas de ayuno.

Se le inyectará un contraste que permite al especialista visualizar las estructuras y los vasos en el corazón. Coméntele al especialista los medicamentos que toma e infórmele si es alérgico o ha tenido reacciones al material de contraste o al yodo.

La corrección de la CIA dura aproximadamente una hora.

Recuperación

La recuperación es rápida y sencilla. De todas formas, durante el mes siguiente a la intervención, se debe evitar toda actividad física exigente.

El paciente deberá seguir todas las recomendaciones de su médico en cuanto a medicación, alimentación y estilo de vida.

Riesgos y complicaciones

Las complicaciones posibles son las mismas que en el cateterismo y la angioplastia, pero en este procedimiento se pueden sumar otras: 

  • Embolismo aéreo (una burbuja de aire que bloquea el flujo sanguíneo en un vaso)
  • Reacción alérgica al contraste o a la anestesia
  • Apnea (ausencia temporal de respiración)
  • Arritmia
  • Fístula arteriovenosa (conexión anormal entre una arteria y una vena)
  • Hemorragia
  • Perforación cardíaca y derrame pericárdico
  • Erosión o disección de tejido cardiaco
  • Taponamiento cardíaco (compresión del corazón que se produce cuando se acumula sangre o líquido en el espacio situado entre el músculo cardíaco y el saco de revestimiento externo del corazón)
  • Embolización/migración del dispositivo
  • Fiebre
  • Bloqueo cardíaco (una interrupción en el ritmo normal del latido cardíaco)
  • Hematoma/pseudoaneurisma
  • Infección 
  • Infarto de miocardio
  • Embolia periférica
  • Cortocircuito residual (flujo de sangre a través del defecto debido a una oclusión incompleta)
  • Accidente cerebrovascular o ataque isquémico transitorio 
  • Episodio tromboembólico (cuando se suelta un coágulo sanguíneo y tapona un vaso)
  • Daño en la válvula
  • Complicaciones del punto de acceso vascular
  • Muerte

Tecnología

 

Cardiocentro cuenta con un angiografo de última generación: Innova IGS 530, de General Electric. Está diseñado para adaptarse a diversos procedimientos vasculares intervencionistas, ofreciendo una muy buena calidad de imagen, con la menor dosis posible de radiación. 

Contacto

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