La embolización prostática es una técnica realizada por radiólogos intervencionistas y urólogos, y consiste en introducir un catéter por la arteria femoral, guiado por angiografía, para ocluir con microesferas las arterias que llegan a esta glándula y así reducir su tamaño.
Este tratamiento es una alternativa cuando la medicación oral ya no surte efecto sobre la afección y el paciente no puede o no desea someterse a una cirugía convencional.
Se trata de una técnica mínimamente invasiva, que se realiza con anestesia local y permite el alta a las 4 o 6 horas, así como retomar la vida normal al día siguiente. Entre sus principales beneficios, se destaca que no tiene efectos secundarios debilitantes, como impotencia e incontinencia urinaria.
Escuche la entrevista completa con el Dr. Omar Clark, jefe de Urología de la Asociación Española, y el Proctor Dr. Francisco Carnevale, radiólogo intervencionista del Hospital Sirio Libanés: